miércoles, 12 de diciembre de 2018


OPERACIÓN KILO Y JUGUTE SOLIDARIO: CAMPAÑA NAVIDEÑA 2018 EN EL IES FEDERICO GARCIA BERNALT.
GRACIAS A TODOS.
CAJAS SOLIDARIAS: La Asociación de Emergencia Social Cajas Solidarias nació en Salamanca en 2013 y en sus tres años de vida se han convertido en el sustento básico de 80 familias salmantinas que, cada mes, acuden a la sede para recoger alimentos y productos básicos de higiene y limpieza. Pero este tiempo también ha sido un periodo de crecimiento y desarrollo de la propia organización, ya que han visto cómo evolucionaba su trabajo y se ampliaban los campos de acción, incorporando servicio de apoyo escolar, apoyo familiar e incluso, en ocasiones, en situaciones extremas, ha tenido que hacer frente a recibos de luz o calefacción de alguna familia. Un simple impulso, la ocurrencia de instalar en tu lugar de trabajo una caja con el propósito de recoger ayuda para una familia en situación crítica, esa fue la semilla de la Asociación de Emergencia Social Cajas Solidarias, una entidad que ayuda y reparte alimentos y otros servicios básicos a un centenar de familias que viven en Salamanca. 
   Todo surgió el día que se cruzo en su vida a unos “idealistas” una familia que pasaba por una situación de necesidad límite. Una mañana llegó a su empresa, uno de  ellos, y pidió permiso para colocar una caja en la que recoger ayuda para esa familia, la respuesta fue estupenda. Y ese fue el germen de Cajas Solidarias; es la historia que explica del objetivo de la asociación y también el propio nombre.
 ASECAL: La calle como espacio para la socialización para trabajar con jóvenes desfavorecidos en el Programa de Educación de Calle.  Actualmente, los servicios, se llevan a cabo  en los Barrios de Vidal y Pizarrales. Aunque la asociación nació en 1997, este programa surgió en el año 2000, cuando los jóvenes pasaban más tiempo en la calle que ahora. Trabajan sobre todo en las zonas periféricas con mayor problemática social y con familias desestructuradas. El perfil de estos jóvenes ha cambiado y Asecal se ha ido adaptando a los cambios de la sociedad. Son jóvenes de origen inmigrante, marroquíes y rumanos principalmente. Con ellos se trabaja la inclusión y la relación de los chicos y chicas nacionales con los que no lo son. Dinamizar la calle ahora tiene que ver con la inclusión, añade. “Hace algunos años la calle era un espacio de socialización y ahora se entiende como un lugar peligroso”. Por eso desarrollan actividades para recuperar la calle como espacio y para socializar. Los principales peligros que hoy en día tiene la calle con respecto a hace algunos años, tienen que ver, por ejemplo, con el tráfico, que reduce ese espacio fundamental para la convivencia. Incluso en los que hay confluyen los jóvenes con los mayores que ocupan los bancos, como es el caso de la Plaza del Barrio Vidal. Son lugares de conflicto continuo, opina, lo que hace que se terminen marchando a otras zonas de la ciudad. Una calle como lugar para la socialización en la que los jóvenes se sintieran libres, sería la ideal para ASECAL, en la que nadie se sintiera vigilado, ni siquiera por los padres, añade. Se imagina un espacio ideal, una calle en la que los coches dieran paso a las personas, hubiera más educación en el ámbito familiar y mayor compromiso de la Administración.














Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo el año. (Charles Dickens) 


No hay comentarios: