Mi cerebro está a punto de pegarse un tiro. Éste, en principio, será mi último año en el Bernalt, al igual que el de otros muchos. Y, pese a ser el último, no es, ni mucho menos, el más sencillo. Toca estudiar a diario, y no es coña. Puedes llegar a tener dos exámenes en un mismo día, o no tener ninguno, y aprovecharlo igual. El caso es sacar tiempo de donde sea.
Al contrario que en cursos anteriores, no existen Alternativa, Religión o Educación Física, asignaturas en las que, de vez en cuando, podías aprovechar para estudiar o repasar. En 2º de Bachillerato, la única hora medianamente libre es la Tutoría, y se exprime al máximo; cualquier asignatura en la que falte un profesor se aprovecha para hacer deberes, así la tarde se utiliza para exámenes. Incluso hay que levantarse pronto algún que otro finde para dar el callo; bajo tanta presión, el cerero acaba por suicidarse.
Hay gente que piensa que con estudiar para el cinco es bastante, pero la realidad es muy diferente: es cierto que, en Selectividad, si tienes una media de 5 en el Bachillerato, y apruebas los exámenes, pasas; pero, con esa nota, es muy probable que no vayas a ningún lado, porque sí, has aprobado, pero hay muchos que han estudiado más, superan tu nota y tienen prioridad.
Éste es un artículo, aparecido hoy en El Adelanto, en el que se habla de las PAEU en 2010:
"Las universidades podrán determinar qué materias de modalidad de Bachillerato son prioritarias y puntúan más para acceder a cada titulación en la fase de examen voluntario que fija la nueva regulación de la selectividad, que se aplicará desde junio de 2010.
A partir del curso 2011-2012 se incorporará una prueba oral de lengua extranjera que podrá ser en inglés, francés, alemán, italiano o portugués, según el Real Decreto aprobado ayer por el Consejo de Ministros.
Por primera vez, los titulados en FP Superior y en enseñanzas de régimen especial podrán acceder directamente a la Universidad y los mayores de 40 años podrán hacerlo acreditando su experiencia laboral, según la referencia del Consejo de Ministros.
La norma, elaborada por los Ministerios de Educación, Política Social y Deporte y de Ciencia e Innovación, regula también la prueba para mayores de 25 años y el acceso a la Universidad de "todos los mayores de 45 años aunque no dispongan de titulación académica ni de experiencia profesional".
La selectividad se dividirá en dos fases: en la general, al igual que ahora, los alumnos deberán examinarse de las asignaturas comunes (Lengua Castellana y Literatura, Lengua Extranjera, Historia o Filosofía y, en su caso, Lengua cooficial) y se incorporará una materia de modalidad elegida por el alumno.
Ésta será una de las asignaturas especializadas asociadas a cada vía del bachillerato (Artes, Ciencias y Tecnología, y Humanidades y Ciencias Sociales).
Como ahora, los alumnos que obtengan un 5 de media entre la nota de Bachillerato (que contará un 60 por ciento) y la calificación de la fase general de la prueba (que contará un 40 por ciento), podrán acceder a la Universidad siempre que hayan logrado un mínimo de 4 en la fase general.
La fase específica (voluntaria) permitirá mejorar nota a los alumnos que quieran acceder a las facultades con número limitado de plazas. Para ello se examinarán de otras asignaturas de modalidad diferentes de la elegida en la fase general, aunque no las hayan cursado durante el bachillerato, que estén asociadas a la rama de conocimiento del grado universitario en el que quieran ser admitidos. Cada universidad podrá señalar asignaturas concretas a las que concedan especial valor para determinado título. De esta manera, cada uno de los dos exámenes voluntarios supondrá sumar hasta un punto a la nota final, o dos si la universidad ha señalado esa asignatura como prioritaria.
Al comienzo de cada curso, las universidades señalarán las asignaturas prioritarias y la comisión de cada universidad hará público el tipo de examen (número y tipo de preguntas y criterios)."
Ya veis, el último año es un gran escollo que muchos superarán, pero sólo algunos conseguirán lo que buscan.
